Proceso de bancarización islámico
El proceso de bancarización islámico es un proceso en pleno desarrollo en multitud de países, por lo que los principios e instrumentos financieros han ido evolucionando a medida que los principios de banca islámica han sido comprendidos y asimilados de forma creciente por el público en general. Aun cuando la experiencia de cada país haya sido diferente, es posible distinguir tres fases generales que han caracterizado este proceso.
La primera fase
Se inicio con el establecimiento de instituciones mixtas que ofrecen un número selecto de productos en aquellos países donde la población gozaba de cierta familiaridad con los principios islámicos. En esta fase, algunos bancos convencionales decidieron abrir ventanillas islámicas mediante las cuales podían atender las necesidades de negocio de aquellos clientes que deseasen operar según los principios establecidos en el Shariah.
Seguidamente, un número creciente de bancos comerciales en todo el mundo mostró interés en la posibilidad de ofrecer productos financieros islámicos. Este interés no solo respondía al deseo por parte de estos bancos de explotar las oportunidades de negocio ofrecidas por una creciente población musulmana en muchos países, como por ejemplo, en el Reino Unido, sino que también estaba motivado por el deseo de atraer a un numero creciente de inversores internacionales que desearan realizar transacciones bajo el ámbito de la ley islámica.
La segunda fase
Se ha caracterizado por el establecimiento de bancos con vocación puramente islámica. Al contrario del caso de las ventanillas islámicas, los bancos islámicos son instituciones que operan al cien por cien siguiendo los preceptos del Islam. Es importante resaltar que el uso de las ventanillas islámicas como plataforma de penetración en la industria financiera islámica ha sido una practica mas frecuente en el sudeste asiático que en oriente próximo y/o los países occidentales, en donde la tendencia reciente apunta al establecimiento de bancos puramente islámicos.
La tercera fase
Se ha caracterizado por la expansión de las finanzas islámicas a nivel mundial, desarrollándose así un verdadero mercado de capitales islámicos. En esta etapa, instituciones financieras ofrecen un menú creciente de productos islámicos. Así, términos como sukuk (bonos islámicos ) que eran completamente desconocidos en las principales plazas financieras hace una década, hoy día forman parte del menú de activos financieros accesible a los inversionistas internacionales.
La primera fase
Se inicio con el establecimiento de instituciones mixtas que ofrecen un número selecto de productos en aquellos países donde la población gozaba de cierta familiaridad con los principios islámicos. En esta fase, algunos bancos convencionales decidieron abrir ventanillas islámicas mediante las cuales podían atender las necesidades de negocio de aquellos clientes que deseasen operar según los principios establecidos en el Shariah.
Seguidamente, un número creciente de bancos comerciales en todo el mundo mostró interés en la posibilidad de ofrecer productos financieros islámicos. Este interés no solo respondía al deseo por parte de estos bancos de explotar las oportunidades de negocio ofrecidas por una creciente población musulmana en muchos países, como por ejemplo, en el Reino Unido, sino que también estaba motivado por el deseo de atraer a un numero creciente de inversores internacionales que desearan realizar transacciones bajo el ámbito de la ley islámica.
La segunda fase
Se ha caracterizado por el establecimiento de bancos con vocación puramente islámica. Al contrario del caso de las ventanillas islámicas, los bancos islámicos son instituciones que operan al cien por cien siguiendo los preceptos del Islam. Es importante resaltar que el uso de las ventanillas islámicas como plataforma de penetración en la industria financiera islámica ha sido una practica mas frecuente en el sudeste asiático que en oriente próximo y/o los países occidentales, en donde la tendencia reciente apunta al establecimiento de bancos puramente islámicos.
La tercera fase
Se ha caracterizado por la expansión de las finanzas islámicas a nivel mundial, desarrollándose así un verdadero mercado de capitales islámicos. En esta etapa, instituciones financieras ofrecen un menú creciente de productos islámicos. Así, términos como sukuk (bonos islámicos ) que eran completamente desconocidos en las principales plazas financieras hace una década, hoy día forman parte del menú de activos financieros accesible a los inversionistas internacionales.